Salimos con solo 15 minutos de retraso

Salimos con solo 15 minutos de retraso, un éxito para nuestro caribeño modo de organizar las cosas...Luego de la bienvenida a la excursión por los aspirantes a guías de la FEU Nacional (Federación Estudiantil Universitaria) nos pusieron una película que aun no había visto, por lo que mitad disfrutamos de ella durante la ida y parte del regreso, mitad del paisaje, que a pesar de la sequía del invierno y pasado verano, aun es bello y no por revisto disfruto menos. A mitad de camino disfrutamos de una merienda en un sitio de parada en la carretera y seguidamente continuamos hacia las cuevas, adonde llegamos alrededor de las 10:30 am.

Antes disfrutamos de la maravillosa vista de la Bahía de Matanzas, con las ventajas que ofrece a ello la poca vegetación de esta época del año. El sitio está cerca del aeropuerto de Varadero en un sitio llano y rodeado de calizas. La cueva no es mas que una hendidura natural, de mediano tamaño y algunos metros de profundidad, cuyo fondo está cubierto de una cristalina y bastante frescas aguas, todo preparado como piscina natural y donde los mas jóvenes y calurosos disfrutaron del primer baño.

Yo preferí el solecito en las tumbonas de los alrededores y un cafecito bajos las carpas de la cafetería, luego del calentoncito, pues el lugar ya lo conocía del paseo que dimos en el verano con los chicos de la UCO y además de los inconvenientes del bañador, no me agrada mucho aguas tan profundas y frias. Una hora mas tarde seguimos viaje a Varadero, a donde llegamos cerca de las 12 del día y nuevamente los pequeños y jóvenes se prepararon al baño. Ciertamente muchos no hicieron mas que yo, mojarse los pies. A las 2.00 pm mas o menos almorzamos (nosotros lo llevábamos preparado), aunque olvidamos donde servirlo pero entre la inventiva y a que algunos llevaban sus vasijas logramos comer por turnos. Seguidamente nos fuimos al parque de diversiones llamado “Todo en Uno”, para cada aparato necesitas una papeleta que cuesta 1 CUC (peso cubano convertible) Terminó el día con un paseo al Parque Josone, el cual fue por mucho tiempo el centro de recibimiento de presidentes y delegaciones extranjeras en ese lugar y hoy un centro de disfrute libre.